La película El Niño de Daniel Monzón no ha pasado desapercibida en las salas: llegó a las pantallas el 29 de agosto y, en el fin de semana de su estreno, recaudó 2,85 millones de euros y consiguió así la mejor cifra de todo 2014 (sí, estuvo por encima de la recaudación de Ocho apellidos vascos en su primer fin de semana). ¿Se reflejará el éxito en el cineturismo a Gibraltar?
Tabla de contenidos
Gibraltar y otras localizaciones
El primer paso que se debe dar al analizar el fenómeno del turismo cinematográfico es comprobar qué localizaciones se emplearon para el rodaje del largometraje en cuestión. En el caso de El Niño, la ciudad de Gibraltar tiene un peso fundamental en la historia porque la película nos muestra las «aventuras» de los narcotraficantes a ambos lados del Estrecho, así como los progresos y fracasos de los policías que luchan contra ellos.
Pero no todas las imágenes que vemos en la película y que se atribuyen a Gibraltar se han tomado en la ciudad. El equipo rodó, por ejemplo, en la playa de Santa Bárbara de La Línea de la Concepción, en la playa de Los Genoveses de Almería, en San Roque, en Algeciras… y en Canarias, donde se invirtieron unos 6 millones de euros de la producción.
¿Canarias o Gibraltar?
Si bien muchas de las localizaciones canarias se podrían haber encontrado en Gibraltar, los incentivos fiscales y las facilidades para el rodaje fueron decisivos para las decisiones tomadas por el equipo de producción. No obstante, aunque para muchos sea fácil reconocer las localizaciones, para la gran mayoría del público los escenarios se asocian a la ciudad de Gibraltar y se unen al conjunto de imágenes que parecen ensalzar la belleza de la zona.
No olvidemos que en más de una ocasión podemos ver el Estrecho, pasear por las calles de Gibraltar o identificar el paso fronterizo con España… Para el gran público, todo es Gibraltar –salvo lo que se identifica en la película como Marruecos–, y probablemente el efecto sobre el turismo cinematográfico se haga notar mucho más allí que en Canarias.
Se trata solo de un caso más, uno entre tantos, en los que un territorio –en este caso, Canarias– se beneficia del rodaje durante el proceso de producción, mientras los beneficios económicos posteriores derivados del cineturismo recaen en otra zona –Gibraltar en este ejemplo–.